14 de octubre de 2010

Orango Grande

"En la isla de Orango Grande, en el archipiélago de las Bijagós, frente a la costa de Guinea Bissau, hay una tierra donde las mujeres tienen todo el poder, donde se organizan en asociaciones que gestionan la economía, el bienestar social y la ley. Son ellas las que imponen sanciones, dirigen, aconsejan, distribuyen y se las respeta como dueñas absolutas de la casa y de la tierra.
Sólo se recurre a los hombres para el barbecho de los campos, la caza del mono y la pesca."

Fotografía y texto de Anna Boyé, más información aquí.

Para más información sobre turismo ecológico en la zona sugiero que os pongáis en contacto con:
Fundación CBD-habitat
www.orangohotel.com


En algunas de estas islas no existe electricidad ni mucho menos agua corriente. La gestión económica, la administración y el dictamen de las leyes está en manos femeninas.

Los hombres reconocen la autoridad que el dios Nindo ha conferido a las mujeres, viven felices y en armonía. Muchos quisieran casarse pero tienen que esperar que la mujer deseada le proponga matrimonio. La mujer prepara un plato a base de conchas de mar que deja delante de la puerta del elegido. Comer o dejar la sopa es aceptar o rechazar la propuesta.

Se habla poco de este sitio, muchas veces sólo para mencionar la existencia de hipopótamos marinos que nadan plácidos en éstas aguas femeninas. A los extranjeros les queda prohibido pernoctar en ciertas islas consideradas sagradas. El año pasado descubrieron yacimientos de petróleo submarino, y en las más occidentalizadas de este archipiélago secuestraron varios kilos de cocaína.
 
Cuánto le falta al matriarcado en convertirse en patriarcado, solo el dios Nindo lo sabe.