24 de septiembre de 2012

La abrumadora masculinidad de los asesinatos en masa.

"¿Cuántos de los peores asesinos en la historia estadounidense eran mujeres? Ninguno. Esto no es sugerir que las mujeres no son violentas, y existen incluso raros casos de asesinas en serie. Pero ¿por qué no hablamos de la evidencia de que actos de asesinato en masa (y, de hecho, todo otro tipo de violencia) abrumadoramente son perpetrados por hombres? Señalar este hecho puede parecer políticamente incorrecto o irrelevante, pero nuestro silencio acerca de la enorme disparidad de género de este tipo de violencia puede estar costando vidas."

"El silencio sobre la genderización de la violencia es tan inexplicable como indefendible."

"Necesitamos aprender mucho más acerca de cómo prevenir la violencia, pero podríamos comenzar con la diferencia entre sexos que no puede ser obviada."



No voy a ocultar mi decepción, y es que el sexo masculino es (somos) de alguna forma, ya sea bien por motivos genético-hormonales o bien culturales-sociales, un sexo problemático. Los hombres, o bien nacemos con defectos de fábrica o bien algo falla en nuestra socialización, y no debería avergonzarnos admitirlo. Es evidente.

Los matriarcados repartidos por los cuatro puntos cardinales han tenido eso en cuenta: no todos los hombres entienden el poder (económico, físico, político,...) como un instrumento al servicio del bien común.

Por ello, las sociedades matriarcales limitan el acceso de los varones a determinados recursos y derechos, por discriminación positiva y como medida preventiva.

Por lo general, con mejores resultados para el sano crecimiento emocional de la infancia.